¡Ay! Chinameca ingrata.
¡Ay! Guajardo traicionero
tú mataste a Zapata
porque le tuviste miedo.
Voy a escribir está fecha
en el reverso de un sobre,
ya mataron a Zapata
el defensor de los pobres.
Los pelones carranclanes
lo mataron a la mala,
porque Emiliano Zapata
los desafió cara a cara.
Por toditas las cañadas
las cámpanulas de plata,
se doblegan tristemente
¡por la muerte de Zapata!